LA MIRADA DE ULISES
Se levantó del lecho y abrió una cerveza
soñaba que dormía de nuevo con Penélope
pero se despertaba con la cara de Circe.
Dormir, soñar, vivir acaso
en un sueño imposible,
una esperanza condenada al fracaso.
Amar, sólo se ama lo que uno mismo crea
y él hubiera creado una nueva mujer que mantuviese
la forma de sus manos, el olor de su aliento,
el calor de su pecho,
Pensó en Narciso y dijo: <<me amo sólo a mí mismo>>.
Termina la cerveza y se mira al espejo
Que reflejaba el rostro triste de Leopoldo Bloom.
Autor: Jorge Urrutia
ÍTACA
Cuando emprendas tu viaje a Ítaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colectivo Poseidón.
Seres tales jamás hablarías en tu camino
si tu pensar es elevado,
si selecta es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Poseidón encontrarás
si no los llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante tí.
Pide que el camino sea largo,
que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!
A puertas nunca vistas antes.
Détente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades Egipcias a aprender, a aprender de sus sabios.
Ten siempre a Ítaca en tu mente.
Llega allí es tu destino.
Más no apresures nunca el viaje.
Mejor que dure muchos años
Y atracar viejo ya, en la isla,
Enriquecido de cuánto ganaste en el camino
Sin aguantar a que Ítaca te enriquezca.
Aunque la halles pobre, Ítaca no te engañaba.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
Entenderás ya qué significan las Ítacas.
Autor: Kons Tantinos Kavafis